Era ésa tarde en la que sentía tanto hastío cansada de llorar me fui a correr cerca del parque donde nos habíamos conocido. Empecé a caminar, cuando lo presentí. Sin verlo sentí sus manos su boca apresó mi intento. Fui del amor en un momento, en que la lluvia torrencial comenzó a caer, y el parque se convirtió en un desierto©